August 30, 2006

KID STARDUST EN EL PATIO DEL COLEGIO


"You can even bring your baby
Oooh-ooh-ooh-ooh-ooh-ooh-oooh"
Pulp


Varios años después me volví a encontrar con ellos. A July P. solían tratarla como la peste. Los tipos deportistas tomaban su delantal y se masturbaban encima para exorcizar el asco. Ahora la vi como vendedora en Zara. Alta, delgada y hermosa como una pin up. La reconocí de inmediato por sus labios gruesos y esas mejillas flacas, pero no le hable. Imaginaba su espalda manchada por el odio de los demás, lubricando el cierre de diseñador.
Recordé la suerte de algunos otros. Como el Serrucho D. El matón del curso y presidente de curso que te obligaba a votar por el cada año para ganarse la inmunidad. Ahora tiene un local de máquinas tragamonedas y un clandestino en Independencia. Una casa de tres pisos y pasea a su hijo más chico que se viste como Daddy Yankee. Me presentó a su mujer y una vez terminado el ceremonial menor y quedarnos sin temas, animé la situación con esas anécdotas infantiles: le conté que su marido le robaba las toallas higiénicas a sus compañeritas y las pegaba en el techo de la sala o que apostaba la plata del curso en el Teletrak. Me echaron de la casa antes de llegar al living.
De los demás no he sabido mucho: Dilbert, alias Macaulay Culkin, hoy trabaja en un matadero y llora cada vez que debe darle el golpe de gracia a algún animalito de la creación. Teresa es monja y ha intentado escapar tres veces de sus votos, Hernacio se volvió uno de esos poetas que viven del auspicio del gobierno y se lo pasa llenando formularios para costearse el año siguiente y el siguiente después de ese.
En general todos están felices mutando. Revolviéndose como un tarro lleno de gusanos y yo acá. Con los pies colgando de la banca en el mismo patio del colegio, tratando de integrarme a la pichanga de los deportistas, haciendo esa fila eterna del kiosko que nunca logré terminar antes de que sonara la campana.
Hoy vivo quieto como esos cocodrilos que vigilan bajo el barro petrificado del desierto, esperando que la lluvia llegue. Y ya viene. De hecho estoy preparando la mochila y mami aun no me trae la colación.

21 comments:

Galarce said...

El alumno Carlos Salazar necesita estar motivado para aprender, por lo que al final de la estancia recibirá un diploma con las asignaturas, notas y créditos pendientes.

Lore Ortiz said...

Buenísimo relato... si pensamos los que se lucían en el colegio finalmente no fueron tan exitosos, porque ese infantilismo no sirve cuando uno se enfrenta a la verdadera realidad del mundo adulto.
Los pernos pasaron a ser los más inteligentes y apetecidos, mientras que los que vivieron castigados y adorados por el resto por ese estúpido respeto al mal líder, lo pasa mal, porque es detestable... y peor, ni siquiera inteligente.

Un beso, chau
Lore

AKS said...

Tu prosa logra conmover, muchacho. Tu "Reconquista" lo tengo entre los mejores que recuerdo haber leído en un blog.

Saludos.

Loredana Braghetto said...

lo macabro de la época escolar.

Gabriel Mérida said...

escribes muy bien, conmueve como dijo ese otro amigo tuyo. ahora sí añadiré a bloglines.

el primer cometario me dolió un poco pq la historia es real y ocurrió la semana pasada, pero dp caché q era buena onda.

saludos de Gabriel

Dr. César Rivera said...

Cambia todo cambia...

TODO CAMBIAAAAAAAA!!!

Ninfa oz said...

Bastante conmovedor, me acuerdo de diamante en bruto, solo buscaste las palabras correctas, ubicadas en una forma especial y listo, me hace llorar...
Recuerdo el colegio, yo era la perna, ahora... creo que ya no lo soy, pero exito tampoco he tenido...
y tu?
besos

paradise said...

a mi la verdad no me sorprende que un tarro con gusanos siempre se revuelva.
actualizaré.

angela.bustamante said...

me encanto el relato.... me suena a quien rie último rie mejor...

Bueno... eso suele suceder y no solamente en las telenovelas...

Saludos sr. Papelucho suicida

Anonymous said...

Oye Papelucho no todo fue tan malo, recuerda que ayudaste al gordito del curso a pasar el segundo medio y además saliste el niño símbolo de la biblioteca. Notable premio.
Besos

MaGaStYLe said...

nunca nadie dio un peso por mi en la epoca escolar salí de cuarto medio a los 15 después de pasar por 14 COLEGIOS!!!.
Las niñas me odiaban por que los niños que les gustaban se reian conmigo y no con ellas así que me aislaban y nunc ame invitaron al mall ni nada, ahora estan convertidas en unas gordas amargadas y odiosas, tengo un compañero q es colectivero, uno que es personal training (que ha crecido en capacidad muscular casi monstuosamente)una compañera experta en ángeles, una peluquera, una mamá de 4 cabros con marido millonario, uno concertista en guitarra clásica y yo que juego a ser periodista y a ser mamá feliz con eso y cachando que la vida es ahora como dice la tarjetita , no mañana ni pasado, esto tb lo aprendí en el cole mi mejor amiga se compro un vestido que espero un mes en estrenar, bueno lo estreno en el ataud , murió dos días antes de la fiesta.
sad but true.
besos y que bueno que reapareciste.

besos percaleros

lau

Luis Cabrera said...

Hola amigo, siempre es especial recordar los días de colegio. Que pases un buen fin de semana.

Kathy_C said...

Papelucho es mi mentor.

Otracolumnavertebral said...

Me gustaba 'Papelucho y mi hermana Ji', pero ahora me gusta más Papelucho asesino.

Atte.

La beata del curso.

Anonymous said...

Grande Carlangas

Me gustó tu último relato, me acorde de del 'Adoquín' de Benedetti :)

Le puse fin al Time, sigo acá sólo hasta fin de mes.

Un abrazo,

Claudio

Francisca Araya said...

Hace un par de dias me di cuenta que el 2007 se cumplen 10 años desde que salí del colegio ¡10 años! Yo que me creía una pendeja a salvo de los adultos. Por suerte mi paso por la secundaria estuvo al margen de pernos y deportistas. Ahora nos encontramos en la calle y nos alegramos inocentemente de vernos bien.

Francisca Araya said...

Hace un par de dias me di cuenta que el 2007 se cumplen 10 años desde que salí del colegio ¡10 años! Yo que me creía una pendeja a salvo de los adultos. Por suerte mi paso por la secundaria estuvo al margen de pernos y deportistas. Ahora nos encontramos en la calle y nos alegramos inocentemente de vernos bien.

Aristóteles said...

¡Padrísimo!

Que bien se la pasa uno cuando vive, disfruta y experimenta la vida pasada... cuando se sabe aprovechar el tiempo no se añora.

Como ves, ya estoy de regreso.

Te mando un abrazo.

Anonymous said...

En mi colegio, eramos terribles de malos. Mi generacion fue la mas desordenada y eramso terribles con los profes...
Aunque l averdad es que no fue asi. Mas bien, elos eran asi, pero yo era timido. Un pobre weón si se quiere.

Anonymous said...

Me acuerdo una vez que mi abuelo me dijo que ya no se acordaba de los nombres de sus compañeros de colegio, fue justo en la época en que yo estaba saliendo del colegio, donde todo es amor, y me pareció que uno debiera hacer el esfuerzo por recordarse de los mejores momentos.

Ahora, después de 11 años, del amor queda bastante poco y en realidad los recuerdos se van borrando.

El colegio es en realidad una burbuja muuuy aburrida.

Anonymous said...

¡Hola, Papelucho¡ No te conozco, pero gracias por visitar mi blog.